viernes, 23 de marzo de 2012

César

Se disputó una nueva entre el martes y el jueves de esta semana. Volvieron a ocurrir cosas bastante salientables, como por ejemplo la nueva reducción de la ventaja entre los dos primeros clasificados, Real Madrid y Barcelona.

El Real Madrid se dejó dos puntos en su visita a Villarreal, de nuevo en una jugada a balón parado, ni Casillas ni los componentes de la barrera estuvieron muy finos a la hora de defender dicha jugada, primero se salió de la barrera el jugador que cubría el palo y Casillas dejó demasiado descubierto ese mismo palo, por lo que Senna no tuvo que realizar un gran lanzamiento para meter el gol. Lo siguiente, pues lo de casi siempre que el Madrid no gana (al menos desde la llegada de Mouriho) un completo despropósito, desde una nueva pérdida de papeles de Sergio Ramos, hasta una nueva expulsión del propio entrenador portugués, esta vez acompañado por una de sus ayudantes Rui Faría, también habitual en perderse parte de los partidos por culpa de su incontinencia verbal. Yo creo que a pesar de todos estos desmanes de la plantilla y cuerpo técnico madridista, quien realmente tiene motivos para quejarse de la actuación arbitral es el Villarreal que vio como con empate a cero en el marcador no se le señalaron dos claros penaltis y no se oyeron quejas de ningún tipo, dando una lección de lo que cuando yo tenía diez o doce años daba el Madrid, señorío.

El Barcelona ganó con muchas más dificultades de las previstas al Granada. La verdad es que solo vi la primera parte, en la que el marcador señalaba un dos a cero para el equipo local. En la segunda llegó a señalar un empate a dos y partir de ese momento apareció Messi para poner las cosas en su sitio. Messi batió el record goleador de un jugador con la camiseta del Barcelona, dicho record estaba en poder de un jugador de la década de los cincuenta del pasado siglo, César. No me cabe ninguna duda del merito de Messi al
conseguir un nuevo registro con la camiseta del Barcelona, pero de lo que tampoco me cabe duda es del enorme merito de este César, al que casi ninguno de nosotros pudo ver jugar, mantener un record goleador en un equipo tan importante como este durante tantos años tiene merito y mucho más jugando en una época en que la cantidad de partidos que se jugaban a lo largo de una temporada era muy inferior a la que disputa hoy en día.

Dicho todo esto sigo creyendo que el campeón de liga será el Real Madrid, pero si se empeña en darle emoción a la liga pues mucho mejor. Se nota algo bajón físico en la plantilla del Madrid y le esperan unos cuantos desplazamientos complicados (San Mamés, El Sadar y Vicente Calderón) hasta ahora ha sido sin ninguna duda el mejor equipo de la liga, pero quedan treinta puntos en juego y no demasiada gasolina en el depósito madridista.

En el resto de la jornada cabe destacar una nueva derrota de la Real Sociedad. Esta vez en Anoeta, contra el Levante. Una vez más se vuelve a quedar el equipo con diez, otro penalti en contra bastante riguroso, por no decir que el único que lo vio fue árbitro y también se pudo contemplar una nueva cantada de Claudio Bravo. Estamos en la misma situación del año pasado a estas alturas, sin peligro aparente de descenso, el año se salvo el equipo en la última jornada y casi de milagro, este año ya se verá.

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