En las semanas anteriores a las pasadas elecciones municipales y autonómicas (en algunas comunidades) ha surgido un nuevo movimiento llamado democracia real ya.
En su manifiesto nos dicen que son personas totalmente normales. Gente que se levanta todas las mañanas para trabajar, estudiar o buscar trabajo, gente que en definitiva tiene una familia y amigos como cualquiera de nosotros.
Han estado acampados durante las últimas semanas, en practicamente todas las capitalas de provincia del Estado Español. Piden igualdad, progreso y solidaridad.
A mi personalmente, me parecen muy bien todas estas peticiones, dada la corrupción política a la que nos estamos viendo sometidos los ciudadanos por parte de nuestra clase gobernante, ya que en los últimos años hemos observado como mucha gente se ha quedado en paro, sin una vivienda digna, obligada a pagar una hipoteca durante treinta o cuarenta años y pagar más impuestos que en EEUU y recebir unos servicios tercermundistas. Todo esto mientras los grandes bancos han recebido las ayudas que los ciudadanos necesitbamos para nuestra vida diaria.
Ya dije anteriormente que me parecen bien todos estos movimientos sociales. El problema, es que creo que también están dirigidos políticamente, seguramente por algunos partidos minoritarios, pero dirigidos al fin y al cabo, ya veremos si algún día cuando llegen al poder llevan a cabo todas reformas que proponen.
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